El estreñimiento es uno de los problemas más comunes que podemos encontrar en los niños, y es por ello que el hábito de la salud intestinal debe ser inculcado por el grupo familiar de manera natural y desde el inicio.
Cada niño tiene su propio ritmo de evacuar, para unos es normal que defequen 1 o 2 veces al día, pero otros pueden tener el colón más lento y evacuar de manera inter diaria y por ello no se puede diagnosticar cómo niños con estreñimiento.
Si tu hijo no evacua con frecuencia es importante que determines si sufre o no de estreñimiento, para ellos es importante que conozcas sus síntomas más comunes:
- Dolor abdominal, en forma de espasmos y cólicos. Lo que origina llanto en los niños.
- Dolor y sangrado al evacuar lo que ocasiona que el niño sienta miedo de sentarse en el inodoro y retenga la materia fecal.
- Sensación de llenura y pérdida del apetito.
- Trastorno en la conducta normal, lo que se refleja en mal humor e irritación.
El estreñimiento infantil es causal de muchas de las consultas que realizan los padres al pediatra puericultor, quienes se encargan de orientar de manera general, pero si después de una evaluación completa y de cumplir con las indicaciones, el niño no tiene mejoría es indispensable que lo evalúe un especialista en el área cómo los Gastroenterólogos pediatras.
Esta patología se puede trabajar de diferentes formas:
- Hábitos alimenticios: es importante incorporar la fibra en la dieta diaria, ya que ayuda a mejorar el tránsito intestinal, haciendo que la materia fecal se vuelva blanda, es necesario que esta incorporación sea de manera gradual, progresiva y constante. Igualmente debemos restringir los alimentos que le puedan producir estreñimiento cómo el queso.
- Ingesta de Líquidos: La hidratación es muy importante para la salud en general, ya que nuestra masa corporal tiene un alto porcentaje de agua, es por ello que debemos estar pendientes de la cantidad de agua que los niños consumen diariamente, este simple hábito de ingesta de líquido mejora considerablemente las heces, ya que se vuelven suaves.
- Entrenamiento de deposición intestinal: Los niños en general que presentan esta patología muchas veces retienen la materia fecal porque sienten dolor al expulsarla, es por ello que los padres deben con paciencia y dedicación crear la rutina de sentarse en el inodoro por períodos cortos que comprende de 3 a 6 minutos e ir incorporando de manera progresiva más minutos a la rutina, es importante que sea a la misma hora para que el niño y el intestino se habitúen.
- Incorporar la actividad física: la incorporación de una rutina de actividad física o deportiva es indispensable, al ejercitar el cuerpo se facilita el tránsito intestinal, la actividad puede ser desde caminatas hasta la práctica de algún deporte de preferencia del infante.
- Estimulo por esfuerzo: establece un detalle para agradecer la buena disposición del niño al incorporar a su rutina diaria hábitos para facilitar sus evacuaciones, no es recomendable compensar o premiar con alimentos o golosinas, puede ser una salida planificada, un material de dibujo o deportivo o el uso de un dispositivo electrónico de manera controlada.
Es importante estar atentos al desarrollo y desenvolvimiento de los niños ya que en su crecimiento están propensos a adquirir malos hábitos por falta de planificación de su rutina, pues si una patología como la del estreñimiento no es tratada a tiempo, puede empeorar y disminuir la calidad de vida del niño.
Es importante tomar en cuenta que si las heces no se expulsan a tiempo se van transformando en una materia fecal cada día más dura, seca y aumenta de volumen, lo que originaría mucho dolor al momento de la evacuación.
Por último también te podemos sugerir el uso de suplementos de fibras, los supositorios de glicerina, laxantes o enemas pero es recomendable que estos sean indicados por el pediatra o el especialista en vías digestivas.